Avanza el juicio al ex sacerdote Cristian Vázquez, denunciado por abuso sexual
El Tribunal Oral que juzga a Cristian Vázquez, el primer sacerdote de Tierra del Fuego en ser enjuiciado por abuso sexual, resolvió no volver a convocar a la supuesta víctima del caso -una joven que tenía 13 años al momento de los hechos y ahora tiene 18- para que declare como testigo en el juicio que se desarrolla desde el lunes en la ciudad de Río Grande. La resolución fue adoptada por los jueces Ernesto Borrone, Juan José Varela y Eduardo López, tras un planteo efectuado por el abogado querellante Francisco Ibarra, quien sostuvo que la nueva convocatoria a la joven “solo serviría para revictimizarla”.
“El tribunal dispuso una pericia y se constató que no estaba en condiciones emocionales de enfrentar un interrogatorio judicial. Ella ya había declarado dos veces durante la instrucción de la causa y su testimonio había sido filmado en cámara gesell”, dijo Ibarra en declaraciones a AIRE LIBRE FM.
El letrado detalló que en las audiencias se reprodujeron los videos de esas declaraciones con la presencia de dos peritos oficiales de la justicia fueguina y un perito de parte.
“A nuestro criterio, todos los psicólogos fueron muy contundentes. Cada uno reconoció que la niña estaba angustiada y acongojada, con síntomas propios de un abuso infantojuvenil. Fueron muy concluyentes en eso”, señaló Ibarra.
El abogado también informó que las declaraciones testimoniales en la audiencia continuaron ayer con la palabra de la madre de la joven, quien denunció el caso ante la Justicia, y de una hermana de la víctima.
A su vez se esperaba la declaración de “otras cuatro personas más” en la continuidad de una jornada que “será extensa” y que “busca avanzar en el esclarecimiento de lo sucedido”, confiaron fuentes judiciales.
Vázquez, de 39 años, prestó declaración indagatoria el primer día del juicio y se proclamó inocente, aunque no aceptó contestar preguntas de los jueces.
El ex párroco de la capilla Virgen del Carmen, en el barrio Chacra II de Río Grande, está acusado por la fiscal Laura Urquiza, de cometer tres abusos en perjuicio de la menor en 2013: en dos ocasiones “tocó a la menor en sus partes íntimas, aprovechándose de la inmadurez sexual de la víctima y sin su consentimiento”, y en el otro caso “concretó el abuso con acceso carnal”, haciendo uso de “amenazas y violencia física”, señala el requerimiento fiscal de elevación a juicio.
Por todo ello el sacerdote debe responder por los presuntos delitos de “abuso sexual simple y abuso sexual con acceso carnal agravado”.
La causa comenzó a investigarse en 2016 porque recién en ese momento la menor pudo contarle lo ocurrido a su madre, que radicó la denuncia penal.
El sacerdote llegó al juicio en libertad y separado de sus funciones por decisión del Obispado de Río Gallegos, que también lo sometió a un proceso de la justicia canónica.
(🎙) Aire Libre FM 96.3: