La abogada del abusador Weiss contactó a una víctima y le preguntó si “seguía enojada” con él
El empresario de Ushuaia, Héctor Darío Weiss cumple una condena de 8 años por el abuso de dos niñas de 8 y 14 años. Su abogada, Norma López, contactó a una de las víctimas por el chat de Instagram, en la madrugada del 1 de enero. Le dijo “hola bonita” y le preguntó si “seguía enojada con Darío”. Intervino la Justicia y dictó una medida para impedir cualquier comunicación del empresario con las menores, por sí mismo o través de terceras personas.
A las tres de la madrugada del 1 de enero, la abogada del empresario Héctor Darío “el gringo” Weiss, condenado a ocho años de prisión por el abuso sexual de dos menores de edad, se comunicó a través de la red social Instagram con una de las víctimas de los abusos que se encontraba pasando las fiestas con su padre en la provincia de Córdoba, según explicaron a El Diario del Fin del Mundo fuentes ligadas al hecho.
En la conversación sostenida por chat, la abogada Norma López (defensora de Weiss) saludó a la víctima menor de edad con un “hola bonita”, y le preguntó si “seguía enojada con Darío”, en referencia al empresario que cumple su condena preso en Río Grande.
El extraño episodio fue calificado como un “contacto indebido” por la abogada Karina Echazú, representante de la madre de la víctima y querellante en el juicio donde Weiss fue condenado.
Echazú actuó de inmediato y realizó una presentación ante el Juzgado de Ejecución de condenas, solicitando que luego del “desconcertante mensaje”, ordenara una “medida de protección hacia la menor”, para que Weiss “se abstenga de comunicarse con la víctima, por sí o por interpósita persona”.
El juez de instrucción Javier De Gamas Soler (actuando como magistrado subrogante durante la feria judicial) hizo lugar a la medida a las pocas horas, aún sin que todavía se haya determinado cuál fue el propósito del contacto virtual, y si eventualmente pudiera estar involucrado el propio autor de los abusos.
Según las constancias aportadas por los denunciantes del hecho, la conversación que se produjo entre la abogada López y la menor, fue la siguiente:
“-Hola bonita!!! Soy la abogada de Darío… ¿Querés que hablemos? Si te jode, te incomoda o no tenés ganas decime y no te escribo más.
-¿Darío Weis? Sí, no tengo drama pero los temas judiciales son arreglados con mi abogada.
-Si ¡olvidate de eso! Ya estamos arreglando todo eso, ya le hicimos una oferta y después de las vacaciones seguro vas a tener auto (figura con guiño de ojo) O camio. ¿Vos estás enojada con él?
-Disculpá, me pasas tu whatsapp así te respondo bien por Whatsapp.
– (La abogada le proporciona el número)
-Muchas gracias
– A vos”.
En la presentación judicial consta que la menor le contó lo ocurrido a su madre, a los pocos minutos, y que la progenitora llamó entonces a López, quien le “corroboró que había sido la autora de los mensajes”. Ante ello, la madre le exigió de forma terminante que “no vuelva a comunicarse nunca más con su hija” y le adelantó que realizaría la denuncia correspondiente.
“Lo primero que viene a la mente a quien conoce esta situación es preguntarse: ¿qué hace la abogada de un reo (que cumple condena en un instituto penitenciario de la ciudad de Rio Grande) en el horario de la madrugada de la fiesta de Año Nuevo, buscando en las redes sociales a la víctima menor de edad de su defendido para abordarla de manera ilegal?”, se pregunta la abogada Echazú en la presentación judicial derivada del hecho.
También agrega que lo que se desprende de lo sucedido es “un claro mensaje de parte del mismo Weiss a su víctima”.
“No hace falta ahondar en la sorpresa de la adolescente cuando una extraña -en ese contexto y presentándose como abogada de Weis- le pregunta de repente algo tan personal y fuera de lugar como, si “está enojada“ con quien fue condenado a 8 años de prisión por haberla abusado sexualmente de manera reiterada a ella y a otra menor. La intolerable intromisión en la esfera privada de la adolescente víctima, es claramente un exceso en la actividad profesional de la Dra. Norma Graciela López, lo cual seguramente será analizado en otros ámbitos. No obstante, y en cuanto a lo que a este ámbito respecta, claramente se ve como un intento por parte de Weiss de tomar contacto con quien fuera su víctima a través de su letrada y corroborar si la adolescente “está enojada con él”. Conociendo los hechos de pedofilia por los que Weiss está cumpliendo condena, no resulta extraño el propósito oculto de este contacto”, agrega Echazú en su escrito.
Por otra parte, menciona que la “irrupción” de la abogada le generó tanto a la adolescente como a su grupo familiar, una “intranquilidad espiritual que obliga a tomar otras medidas de resguardo respecto a la menor. Ello, por cuanto, se teme que Weiss, en lo sucesivo, vuelva a intentar comunicarse con la misma de cualquier otro modo, o a través de interpósitas personas como lo hizo en esta oportunidad”.
La Justicia corroboró además, a pedido de la misma letrada, que en el momento de la comunicación virtual (3 de la mañana del 1 de enero) Weiss se encontraba alojado en la Unidad de Detención 1 de Río Grande y no gozando de ningún tipo de salida transitoria o excepcional. Ello para despejar la duda de que el empresario pudiese haberse encontrado junto con López en el momento del contacto.
La abogada querellante también reveló a este medio que le solicitó al juez subrogante de Ejecución una medida adicional de protección de las víctimas de abuso en el caso, consistente en notificarla cada vez que Weiss abandone el establecimiento carcelario donde se encuentra.
Según la letrada, de esa forma, la madre de la menor podría adoptar, en cada caso, “las medidas que estime adecuadas en torno a la protección de la integridad psicofísica” de la joven.
“Nuestro interés es poder prever situaciones de encuentro en caso de salidas extraordinarias o de otro tipo. El juez tuvo por presente la solicitud pero no la resolvió en esta instancia”, explicó Echazú.
Abuso reiterado
Weiss, dueño de las concesionarias de autos Citroën y la distribuidora de bebidas Quilmes en la provincia, fue condenado en mayo de 2018 por los delitos de “abuso sexual simple reiterado en un número indeterminado de veces” en concurso ideal con “abuso sexual con aprovechamiento de la inmadurez de la víctima reiterado, tres hechos”.
Al juzgar el caso en juicio, el tribunal le asignó credibilidad al testimonio de las propias víctimas, al afirmar que, en uno de los hechos, “refleja la verdad real de lo acontecido, pudiendo –entonces- afirmar que encuentro plenamente probada tanto la existencia material del hecho en trato, como la autoría por parte del imputado”. Por ese hecho, los jueces hallaron al empresario como responsable de “abuso sexual simple reiterado, en un número indeterminado de oportunidades”.
En cuanto al otro episodio, los magistrados entendieron que Weiss abordó a la menor “de manera gradual”, hasta que en un momento la increpó con “sorpresivos besos y manoseos”, y agregaron que “el persistente accionar del imputado logró desparecer o torcer la conducta de la víctima”. A la vez, mencionaron que el condenado se aprovechó del carácter y de la “inexperiencia e inmadurez sexual de la menor, así como de su alto grado de vulnerabilidad”. Por todo ello, los jueces señalaron que por este hecho le correspondía al imputado una condena por el delito de “abuso sexual simple reiterado, en concurso real con abuso sexual con aprovechamiento de la inmadurez sexual de la víctima, reiterado”.
La abogada Norma López, ahora defensora del empresario Héctor Darío Weiss en el caso de abuso de menores, es conocida en Tierra del Fuego por un hecho escandaloso sucedido en 2005, cuando se tramitaba el pedido de juicio político al ex gobernador Jorge Colazo.
López, quien en esa época había defendido a funcionarios acusados de hechos de corrupción y también asesoraba al directorio del Banco de Tierra del Fuego, era, a su vez, la pareja del entonces juez del Superior Tribunal de Justicia Ricardo Klass.
Cuando la Sala Acusadora del juicio político de la Legislatura suspendió provisoriamente a Colazo de su cargo, el 7 de septiembre de 2005, el gobierno acudió al Superior Tribunal para impugnar la decisión, a través de un recurso de inconstitucionalidad.
El 12 de septiembre, el Superior Tribunal con el voto de Klass dictó un fallo que ordenó la “inmediata reposición del gobernador hasta tanto se resuelva la cuestión de fondo”. La sentencia tenía sólo cuatro carillas de extensión, incluyendo una última página con cuatro renglones y la firma de los jueces.
Pero lo que originó un escándalo fue que al día siguiente de la sentencia, Colazo firmó el decreto 3343/05 que designó a Norma López, pareja de Klass, como directora del Banco de Tierra del Fuego.
La medida fue interpretada como un claro intercambio de favores entre Colazo y el ex abogado personal de Carlos Menem.
El nombramiento de López intentó ser explicado por las autoridades, aunque a nivel político y social terminó de detonar una bomba de repercusiones.
A consecuencia de ello (y de otros hechos simultáneos) Klass terminó renunciando al cargo, el 26 de abril del año siguiente, cuando había sido acusado por el Consejo de la Magistratura en el marco de un pedido de jury de enjuiciamiento.