DIA 144 Salesiano de corazón entrevista al padre Juan Ticó
Hoy continuamos con la entrevista realizada al padre Juan Ticó, por Miguel Vázquez, que se encuentra en el libro “Río Grande y su gente, la historia y sus protagonistas”, en octubre del año 2000.
Frente a la pregunta que dejamos pendiente ayer:
¿De qué año hablamos cuando se viene a quedar a Rio Grande?
El padre Ticó responde: De 1974, estuve hasta el 77, en el 78 me mandaron de director y párroco a Ushuaia, lo primero que hice fue cambiarle el nombre al colegio que se llamaba San Benito, muchos creían que no había colegio salesiano, por el nombre, entonces yo dije, hay que cambiarle el nombre, primero averigüe porqué le habían puesto San Benito como no había un motivo válido, averigüé si le podía cambiar el nombre y me dijeron que sí y le puse “Don Bosco”, me pasé allí las dos guerras, con Chile y la de Malvinas, luego de seis años me mandan a San Julián nuevamente, donde estoy 4 años, y luego a Rio Grande, porque querían hacer crecer el Museo y desde el año 1989 estoy acá.
El Museo tiene un gran aporte suyo, comenta Miguel Vázquez, a lo que continua el padre Ticó, relatando:
Todos trabajamos acá, esto se hizo con el personal de la escuela, yo me dediqué más a organizar, hice excursiones a Policarpo, lo hice durante 3 años, la primera fue en el año 75, íbamos a caballo cuando no iba nadie, un año paré en la estancia de Policarpo, lo único que había eran cuatro chilenos, al año siguiente volví y les pregunté si había ido alguien y me dijeron: ‘no, usted fue el último’, en todo el año no había ido nadie, de aquí iba el Dr. Bicht para la sanidad de los perros y yo iba con él, y fui juntando todo ese material que hay en el museo, todo lo que hay de indios.
¿Se está perdiendo esto de la taxidermia en el país?
Si se está perdiendo, había en Buenos Aires un Instituto Superior de Taxidermia, yo era muy amigo del que lo hizo -Gallardo- pero él se enfermó y quedó el ayudante pero luego se perdió. Ahora hay taxidermistas en los Museos, pero gente que se dedique no hay, yo puse un muchacho que está trabajando en la escuela y está aprendiendo, le gusta mucho, y él le está enseñando a los chicos, hay que ser un poco artista para hacerlo, para poder dar las formas reales, la técnica es fácil, se le hace un tajo al animal, yo lo hago en la parte de arriba, no en la parte del pecho como dicen los libros, porque allí es más difícil de tapar, se le saca todo el cuerpo, se deja nada más que cráneo, los huesos de las patas y de las alas, hay que limpiar bien el cuero y sacar toda la carne, si queda algo se pudre y pierde las plumas.
¿Cuánto tiempo lleva embalsamar un animal?, se le pregunta.
A lo que continúa: Por ejemplo una gaviota que tiene la piel bastante gruesa puede llevar una semana aproximadamente, porque después que está terminada hay que vendarla para que las plumas se vayan asentando, se vaya secando y no se deforme.
El Museo también cambió de nombre.Le comenta Miguel
Y Juan responde: El Museo se llama Monseñor Fagnano, yo le cambié el nombre, cuando llegué se llamaba “Museo al Padre Bueno”, porque los indios a Fagnano le llamaban el “Padre Bueno”, y cuando venían turistas me preguntaban quién es el Padre Bueno, ¿es usted?’, “ que voy a ser yo” les decía, entonces dije, le vamos a poner directamente el nombre de Museo “Monseñor Fagnano”, y acá no le pedí permiso a nadie.
También le gusta pintar.Le dice Miguel
Y el padre Ticó contesta: No soy pintor, soy aficionado a la pintura, me gusta pintar paisajes, pero reales, no me gusta el paisaje moderno, el dibujo tipo cubismo, eso no me gusta, pinto en óleo, acuarela, antes pintaba tempera, ahora pinto poco, el último lo pinté en 1995, y no lo hago porque no tengo tiempo.
¿Se ha encariñado con Rio Grande?
Si, me encariñe con Río Grande, soy de Santa Cruz, pero me encariñé de Río Grande, cuando me mandaron a San Julián añoraba volver, de todos modos cuando me cambian de un colegio a otro Yo trabajo como si no hubiera pasado nada y me encariño con ese lugar. Yo conocí Rio Grande cuando tenía 3.000 habitantes, más del 90% eran chilenos, se conocían todos, si había una fiesta venía todo el pueblo, luego vino mucha gente del norte, muchos de ellos, muy religiosos y gente muy afecta a la obra de Don Bosco, pero cambió mucho el ambiente, yo a la gente le digo que la Tierra del Fuego es muy acogedora, un ambiente muy sano todavía, comparado con las grandes ciudades (aunque ya hay droga también acá), les digo que sigamos manteniendo esto y que siga siendo un centro de atracción turística, que sigamos dando el mensaje de gente buena. Los indios eran gente buena, los hicieron malos porque los persiguieron y los mataron. Ellos eran gente buenísima, acá venían indios trayendo náufragos para que en la misión les dieran mantas y abrigos. El indio era bueno…
Así termina la entrevista.
El 10 de diciembre de 2012, luego de estar varios días en el Hospital de Río Grande por haber sufrido un AVC, el Padre Juan Ticó, una persona sumamente querida por toda la comunidad, falleció a los 93 años.
(🎙) Aire Libre FM 96.3: