La identidad gastronómica fueguina en riesgo
La identidad gastronómica de Tierra del Fuego, se identifica por sus productos frescos de mar, recursos que suelen ser sumamente costosos y muy escasos a su vez; sin embargo el Gobierno Provincial continúa fomentando la exportación hacia el exterior, un hecho que puede provocar un quiebre en la identidad gastronómica. -AIRE LIBRE FM- dialogó con Julio Lovecce, quien explicó la situación que esta atravesando los gastronómicos fueguinos.
La escases y la alta demanda de recursos marítimos preocupa al sector turístico y gastronómico de Tierra del Fuego, Julio Lovecce, se refirió a la centolla, uno de los principales manjares fueguino y expresó “La centolla es un producto que nunca ha sido abundante, se ha caracterizado por ser un producto escaso y eso obviamente también influye en sus costos, en los precios, por lo tanto creemos que al ser un plato típico de Ushuaia, algo que identifica a la ciudad desde el mundo gastronómico, creemos que tendríamos que propiciar políticas que garanticen o que por lo menos ayuden a que el producto siga estando en la mesa de los restaurantes locales y que el turista cuando viaja a Ushuaia se pueda encontrar con un plato como de hecho ocurre un plato típico de Ushuaia.”
Con respecto a la presentación de productos fueguinos de pesca artesanal, en la cual participo el Gobierno de Tierra del Fuego, señaló “El gobierno presenta como un éxito la idea de tratar de colocar la centolla dentro de la oferta gastronómica de Buenos Aires. Inmediatamente me parece contradictorio porque digo, bueno, mientras estoy escuchando que es un producto que está escaseando en la oferta local dentro de Tierra del Fuego, digo, ¿cómo podemos preocuparnos para colocar un producto escaso dentro de un mercado tan grande como puede ser el de Buenos Aires? Entonces entré a conversar con distintos actores y, bueno, no fueron poco los que me manifestaron que estaban también preocupados por esa política que me parecía que en todo caso chocaba con la realidad, por lo menos la realidad local. Por lo tanto, quizás una de las políticas es justamente tratar de analizar cuál es la demanda local, cuál es la capacidad de pesca de nuestros pescadores artesanales, cuáles son los problemas que tienen nuestros pescadores artesanales y tratar de lograr que se haga un manejo de ese producto lo más, diríamos, inteligente posible como para que perdure en el tiempo y que tanto los pescadores artesanales como quienes ofrecen la centolla en los restaurantes locales puedan seguir disponiendo de ese producto. “
“Hoy el turismo ha crecido tanto en Ushuaia, yo todavía recuerdo cuando llegaban 80.000 turistas a Ushuaia, o menos, y ahora están llegando más de 450.000 turistas, entre cruceristas y turistas. Entonces me parece que la demanda de centolla dentro de un mercado como el de Ushuaia, sin hablar de la demanda que pueda haber en Rio Grande, por ejemplo, me parece que es tan grande como para por lo menos dudar si es que realmente hay tanta centolla, estoy hablando de la centolla en el canal Beagle, como para abastecer a toda esa demanda. Entonces me parece que quizás lo primero sería tratar de analizar si es que es posible, tratar de abastecer ese mercado y analizar si es que conviene venderla en otros destinos.”
Por último señaló “el CADIC, hasta donde yo sé, desde el año 2016, viene alertando al gobierno de que hay un desequilibrio y que hay cierta depredación en ese sentido; entonces me parece que deberíamos analizar eso tratando de impedir, insisto, el trabajo de nadie. Tratar de garantizar que se haga un uso adecuado del recurso, de forma tal que tengan los pescadores y quienes consumen la centolla el trabajo, no solamente para este año, sino para dentro de 20, 30, 40 años.”