Asumió monseñor Santiago Olivera como titular del obispado castrense
El vicegobernador de la Provincia, Juan Carlos Arcando, participó de la asunción del nuevo Obispo Castrense, monseñor Santiago Olivera en reemplazo de monseñor Pedro Candia. La ceremonia se concretó en la Catedral Stella Marís, sede del Obispado Castrense a la que asistieron alto jefes de Fuerzas Armadas. “La democracia es el eco temporal del Evangelio y se construye con diálogo, respeto y convivencia social, no es pensamiento único”, dijo.
“Quiero ser un puente hacia los demás, construir puentes en un mundo de zanjas”. Así definió su misión pastoral el nuevo obispo castrense, monseñor Santiago Olivera, que tomó posesión de su cargo, en una misa presidida por el Cardenal Mario Poli, arzobispo de Buenos Aires, en la catedral Stella Maris, del barrio de Retiro.
“Un puente, es alguien que soporta el peso de todos los que pasan por él. Cuenta su capacidad de servicio y utilidad y un puente entre distintos ministerios, edades, creencias”, manifestó monseñor Olivera. Agregó: “Quiero ser un puente entre ustedes, un puente de aceptación entre nosotros mismos”. “Un puente entre la gente, las cosas, las ideas y las generaciones”.
Monseñor Olivera pidió: “Basta de grietas. Tenemos que saber encontrarnos con el que piensa distinto. La democracia es el eco temporal del Evangelio y se construye con diálogo, respeto y convivencia social, no es pensamiento único”.
El Obispo llamó a “proteger y custodiar la democracia”, ante la amenaza de “todo aquello que nos destruye y separa, de la sospecha, la desconfianza, la violencia, la corrupción y la impunidad. La asistencia espiritual de los militares es algo que la Iglesia ha querido custodiar siempre”, concluyó.
El Obispo Castrense, monseñor Olivera fue consagrado y se firmó el acta correspondiente. Fue recibido para ejercer facultades en una comunidad integrada por las Fuerzas Armadas, de Seguridad y sus familiares distribuidos a lo largo del territorio nacional.
Durante la ceremonia religiosa, monseñor Candia se aproximó a monseñor Olivera, reconociéndolo como pastor diocesano, tras lo cual el cardenal Poli dio inicio a la procesión para concretar la asunción.
En la ocasión se bendijo al Santo José Gabriel del Rosario Brochero acompañado de la lectura de su oración y una oración a la Virgen. Para finalizar la ceremonia, la Banda de Música del Regimiento N°1 de Patricios interpretó el Himno Nacional Argentino.
La ceremonia fue encabezada por el ministro de Defensa, Julio César Martínez; y contó con la presencia del vicegobernador de la Provincia de Tierra del Fuego, Juan Carlos Arcando; el arzobispo de Buenos Aires Mario Poli, entre otras autoridades eclesiásticas junto a mandos militares. Se encontraban el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, Teniente General VGM Bari del Valle Sosa; el jefe de la Armada, almirante Marcelo Eduardo Hipólito Srur; el jefe del Ejército, teniente General Diego Suñer; y el jefe de la Fuerza Aérea, brigadier General VGM Enrique Víctor Amrein; el director Nacional de Gendarmería Nacional, comandante General Gerardo Otero; y el prefecto Nacional Naval, prefecto General Eduardo Scarzello.
