¿Está garantizada la paridad de género en el Concejo de Ushuaia?

¿Está garantizada la paridad de género en el Concejo de Ushuaia?

Los concejales y mujeres de Ushuaia debatirán este viernes 15 un proyecto que busca la paridad de género en el Concejo Deliberante, integrado por siete ediles. Cuatro proyectos rechazados no son la respuesta para un grupo de mujeres que propone incorporar modificaciones a la ordenanza electoral que regula el sistema de preferencias y subsumirlo a la paridad de género. La negativa a debatir una iniciativa en conjunto para que las bancas tengan representación de ambos géneros es uno de los puntos a resaltar en el caso, ya que la otra postura expresa que está garantizada por la Carta Orgánica Municipal.

Esta semana se intensificaron las quejas contra los concejales por parte de agrupaciones feministas, políticas, sociales y periodistas que presentaron un proyecto que propone una “visión de género” para el Concejo Deliberante de Ushuaia. Esta propuesta se enmarca en la discusión a nivel nacional que tiene la distribución del género traducida en las bancas. El 22 de noviembre pasado, el Congreso sancionó al Ley de Paridad de Género con 165 votos a favor y 4 en contra.

Los ediles Silvio Bocchicchio (ECOS) y Hugo Romero (FPV) presentaron proyectos y Juan Manuel Romano (UCR) plantea una mesa de diálogo. En contra están el presidente del recinto Juan Carlos Pino (FPV) y los mopofistas Gastón Ayala y Ricardo Garramuño. El representante del PRO, Tomás Bertotto, aún no manifestó su postura.

El primer proyecto ingresó al recinto en julio pero nunca existió el debate. La iniciativa cuenta con apoyo de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF), a través del Programa de Género y de las concejales de Río Grande, que al contrario, son mayoría en el recinto. Se suman gremios, periodistas, organizaciones sociales y políticas.

“Las mujeres estamos organizadas y eso se refleja en el acompañamiento provincial a la Campaña Mujeres al Concejo de Ushuaia”, expresó María Eugenia Duré (FPV), concejal de Río Grande. Las otras bancas son ocupadas por Miriam Mora (FPV), María Laura Colazo (Partido Verde) y Verónica González (FORJA).

El proyecto

Con un recorrido histórico, que comienza a en 1951, cuando las mujeres fueron consideradas ciudadanas con derecho a voto en Argentina a la actualidad comienza la serie de argumentos que presentaron las mujeres en un proyecto de 14 hojas. El escrito manifiesta la necesidad de establecer la igualdad de género traducida en las bancas, un hombre y una mujer, y así sucesivamente. 

Las estadísticas indican que en el lapso entre 1995 y 2015, fueron electas 8 mujeres y 34 hombres. En las últimas elecciones, la candidata más votada fue Noelia Trentino con 1139 votos y superó a tres ediles electos: Bocchicchio (843 votos), Ayala (783), Bertotto (609) pero no obtuvo una banca. En los comicios se presentaron ochenta mujeres.

Las mujeres proponen incorporar como artículo 36 bis de la ordenanza 2575 lo siguiente: “Determinados el orden de las minorías de las fuerzas políticas que conformarán el cuerpo deliberativo y la cantidad de bancas correspondientes a cada una, se procederá al recuento de preferencias”. La modificación establece la alternancia en las bancas, con las mujeres preferidas y hombres que completen los lugares alternando el género. 

Ingeniería legal

La periodista Luz Scarpati escribió un texto titulado “La ausencia tiene rostro de mujer” publicado en el Rompehielos que señala un dato interesante para reflexionar el tema: “El pueblo le dio muchos más votos y más preferencias a la candidata por el FPV Noelia Trentino que a Silvio Bocchicchio, Gastón Ayala y Tomás Bertotto. ¿Qué dejó afuera a Trentino? La ingeniería legal”.

Y agregó: “El Movimiento de Mujeres presentó un proyecto para modificar esta ingeniería legal. Quien también lo hizo fue el concejal Silvio Bocchicchio. La diferencia entre uno y otro radica en que el primero propone una modificación a la Ordenanza Electoral Nº2578 y el segundo una enmienda a la Carta Orgánica Municipal”.
 
Sobre el contenido de los proyectos presentados, la periodista explicó: “El problema con este último radica en dos aspectos: en primer término, el mecanismo para la enmienda en un poco más dificultoso que la modificación de una ordenanza, y en segundo término -y tal vez más crucial- la herramienta de “las preferencias” está muy arraigada en la sociedad, por lo que es dificultoso que los vecinos y vecinas de Ushuaia se hagan eco de una propuesta que les elimine esta posibilidad, aunque sean muy pocos quienes la usen. El concejal Hugo Romero también presentó un proyecto, el mismo que el del movimiento de mujeres”.
La postura de los concejales

Pino, consultado por el tema, expresó: “Hay dos decisiones que hay que tomar, una es la técnica legislativa, la segunda es una decisión política.”

El funcionario subrayó que la cuestión pasa por una modificación del sistema electoral, “que es lo que le propuse a Fabiana Ríos, si usted quiere modificar el sistema, presente la modificación del sistema electoral. Eso significa llamar a constituyentes. Sino me van a titular a mí de machista porque no quiero modificar o al concejo porque no quiere modificar, no es así, planteen las cosas como corresponde.”

Por su parte el concejal Silvio Bocchicchio (Ecos) aclaró que “estoy en desacuerdo con el tratamiento que tuvieron estos temas –los asuntos fueron rechazados por mayoría en comisión-” y adelantó que en sesión solicitará que los asuntos retornen a la comisión porque “merecen mayor debate”.

En tanto los concejales Ricardo Garramuño y Gastón Ayala (MPF) ratificaron el desacuerdo con el proyecto presentado por el colectivo de mujeres. “Estoy convencido de que el sistema es absolutamente democrático porque se da la posibilidad al vecino de elegir y yo respeto la voluntad popular”, sostuvo Ayala.

Las mujeres mantienen una firme postura de cara al viernes 15 cuando se trate el proyecto. La ex gobernadora, movimientos feministas, periodistas y vecinas que simplemente apoyan a las representantes que buscan modificar una cuestión de género en un Concejo donde las ediles que han pasado por los despachos desde 1999 a la fecha se cuentan con los dedos de una mano. 

¿Qué dicen ellas?

Constanza Ojeda, periodista de Ushuaia, sostuvo que “dada la actual conformación del Concejo es claro es que no existe paridad” y que en ese sentido “existe ilegalidad”.

La comunicadora remarcó que el proyecto presentado por Iniciativa Popular “conjuga los elementos necesarios para garantizar la paridad que actualmente no se está cumpliendo” y se aseguró que “nos votan, nos eligen y aun así no estamos ocupando las bancas”.

“Tanto la Constitución Nacional como la Carta Orgánica entienden muy bien la sociedad en la que vivimos, donde no hay igual de oportunidades”, opinó Natalia Caso.

Gestiones para más derechos

Del 2003 hasta acá pasaron veinticinco varones y solo tres mujeres”, dijo Laura Ávila, titular de la Secretaría de la Mujer de Ushuaia que también impulsó iniciativas de paridad pero entró en polémica un cálculo del Ejecutivo que fue desmentido por Bocchicchio relacionado al proyecto “Gestión menstrual”.

Según el Municipio saldría 70 millones de pesos y el edil señaló que “costaría por año aproximadamente 4 millones de pesos”. 

La iniciativa prevé la provisión de toallas higiénicas, tampones, copas menstruales, ropa interior absorbente y otros aprobados por las autoridades competentes en la materia; y además dispone que el Municipio deberá disponer de sitios adecuados para su utilización. 

De acuerdo al proyecto, los elementos de gestión menstrual deberán encontrarse a disposición de quien lo requiera sin mediación alguna; en los establecimientos públicos de jurisdicción municipal tales como escuelas, centros comunitarios, gimnasios y polideportivos, edificios de la administración municipal, empresas del Estado municipal, entre otros.

Por otra parte el Intendente Walter Vuoto firmó el Decreto 1908/2017 por el que se incorpora y promueve la utilización de un lenguaje inclusivo y sensible al género en el ámbito del Departamento Ejecutivo Municipal. El objetivo es visibilizar a las mujeres y representarlas en pie de igualdad frente a los varones en todas expresiones que se realicen y en todos los documentos que se produzcan en ese ámbito.