Afirman que la ruta fueguina de prostitución y cocaína es “controlada por dominicanos”
En el marco de la política nacional que promueve la expulsión del país de extranjeros con antecedentes, Infobae identificó ayer un grupo en particular vinculado con las redes de trata y narcotráfico, de origen dominicano, que se habría instalado en el sur del país. Sin embargo menciona que los proveedores con generalmente “los narcos que operan en las villas porteñas”, que son “de varias nacionalidades”, y buscan personas de muy bajos recursos que son usadas de mulas.
La nota hace referencia a fuentes de la fiscalía federal sobre el ingreso de droga a Tierra del Fuego “por aire”, como “método privilegiado”, dado que la vía terrestre se complica por el paso por Chile y el ingreso marítimo “es casi nulo”.
“El sistema de mulas es elemental para que la droga llegue al sur. Las bandas optan por contratar personas que escondan cocaína entre sus prendas o equipaje porque es muy difícil de detectar salvo que los investigadores sepan de antemano la existencia de la mula. Hay miles de personas todos los días en los aeropuertos, lo que lo hace prácticamente imposible realizar una revisación a cada pasajero. Sin embargo en el último años comenzó a haber un control más exhaustivo para quienes viajan desde Aeroparque al Aeropuerto de Río Grande”, indica un investigador federal.
Los traficantes dominicanos que operan en el sur no portan grandes cantidades de estupefacientes: “en un vuelo lo máximo que puede transportar una persona son un kilo y medio o dos”, señala el artículo.
El destino fueguino es atractivo por “el precio de lista”, dado que un gramo de cocaína en Ushuaia o Río Grande puede venderse de 800 a 1.000 pesos, mientras que en Capital cotiza entre 300 y 500 pesos. “El kilo que en Buenos Aires puede comprarse a 10 mil dólares en valor mayorista callejero, es vendido a 15 mil en las calles patagónicas, con un considerable estiramiento posterior”, se estima.
Respecto de la comunidad de dominicanos de Río Grande puntualmente, dice que “se acrecentó en los últimos tres años” y de hecho, el año pasado “se instaló en la ciudad un consulado itinerante de la embajada de República Dominicana”.
En las causas judiciales también aparecen los dominicanos con más asiduidad. “No son grandes bandas pero sí familias: padres, hijos, primos que empiezan a vincularse con el negocio. En los últimos tiempos también empezamos a ver enfrentamientos entre bandas de dominicanos, por plata que no se pagó o algún favor que no se devolvió”, explicó una fuente judicial.
Agrega que en los viajes desde Buenos Aires a Tierra del Fuego estas bandas no sólo llevan y traen mulas sino que también “lo hacen con mujeres para ejercer la prostitución. Viajan un mes y después vuelven y así las van rotando. Los hombres se dedican a la droga y las mujeres son utilizadas para la trata de personas. Para sus negocios los dominicanos que se dedican a las actividades delictivas usan como fachadas principalmente lavaderos de autos y peluquerías”, aunque también hay propietarios de bares nocturnos involucrados.
Menciona el caso de Lucy Alberca Campos, una ciudadana peruana de 34 años detenida en 2012 por liderar una banda narco integrada por dominicanos y argentinos que funcionaba en Ushuaia, y también se dedicaba a la trata de personas. La condena, sin embargo, quedó en suspenso, hasta que recibió una segunda en 2018, de apenas cuatro años.
Lo cierto es que las personas extranjeras de bajos recursos son elegidas como mulas con frecuencia por otros inmigrantes que ya se han asentado en el país y lideran las bandas. Arriesgan su vida al tragar “hasta dos kilos de cocaína distribuidos en cápsulas de diez gramos” por unos mil dólares.
Paradójicamente, siendo la parte más débil de la cadena, han recibido condenas de “entre seis a cinco años en los penales federales del país”, muy inferiores al caso citado en Ushuaia para la líder de una banda de trata y narcotráfico.
Las mulas se siguen eligiendo porque “es mucho más barato pagarle mil dólares que enfrentar la larga cadena de coimas y chances de controles en la larga distancia”.
https://www.infobae.com/sociedad/policiales/2019/02/24/los-dominicanos-que-controlan-la-nueva-ruta-de-cocaina-y-prostitucion-de-la-patagonia/