(AUDIO) Torneo de fútbol femenino: Iniciativa en Ushuaia por la libertad de Analía de Jesús
En Bella Vista, Analía De Jesús, una joven lesbiana, está presa desde octubre de 2016 por defenderse del ataque de una patota de diez varones que en otras oportunidades la habían amenazado y apedreado. En la última arremetida intentaron violarla y matarla, y Analía le aplicó un puntazo certero al abusador. Este domingo, en Ushuaia se llevará a cabo un “Torneo femenino por la libertad” en el Cochocho Vargas a partir de las 12, con la idea de jugar y concientizar sobre las situaciones de violencia en donde las mujeres son víctimas.
“Este domingo las esperamos a todas las que quieran jugar, divertirnos y pasar una linda tarde donde aprovechamos para dialogar”, comentó en AIRE LIBRE FM una de las organizadoras del evento al que asistiran diferentes colectivos que apoyan la iniciativa y periodistas. “Cada equipo tiene que ser de 5 jugadoras y tienen que ir a esa hora directamente para inscribirse”, agregó.
“Los partidos serán de 15 minutos con la idea divertirnos y charlar sobre estos temas de violencia en forma de concientización”, finalizó.
El caso Analía de Jesús
Por Página 12. El caso Analía de Jesús no goza siquiera de la empatía popular que despierta la llamada justicia por mano propia. Ante la mirada sesgada de la Justicia, el derecho a defenderse parece ser legítimo sólo cuando lo ejerce un varón y sobre todo cuando lo que corre riesgo es su propiedad. ¿Hasta qué punto ser mujer, pobre y lesbiana tiene peso a la hora de evaluar si existió legítima defensa? Con un expediente repleto de irregularidades, Analía permanece presa acusada de homicidio, mientras sus agresores siguen libres sin ninguna investigación sobre lo que hicieron.
Higui no andaba mucho por Lomas de Mariló. Sabía que las lesbianas no son recibidas por allí. No porque haya pocas lesbianas sino por lo contrario, son muchas y visibles. Es común que algunos (muchos) varones no toleren verlas pasar. No importa si el aspecto de las pibas/señoras se ajusta a un estereotipo masculino o femenino. Lo que importa es que no se sepa que son tortas, porque si se sabe, ellos se van a encargar de ajustar cuentas. Lesbiana que camina por Mariló es insultada, apedreada y golpeada. Al menos en el sector del barrio que corresponde al partido de San Miguel, ese es el código de convivencia. Mujeres y lesbianas, en su lugar. Porque las mujeres heterosexuales tampoco la pasan muy bien con estos varones.
A Analía de Jesús (42) le dicen Higui porque siempre se destacó como arquera. Y porque se parecía a René Higuita, el portero colombiano famoso por la atajada escorpión. Cuando no jugaba al fútbol, Analía trabajaba como jardinera y haciendo limpieza de galpones. Hacía rato que no estaba en pareja y su vida se repartía entre el trabajo y cuidar a su hermana mayor travesti, que estaba enferma. Cada tanto visitaba a sus otras hermanas y a su madre en Mariló, en Merlo y en William Morris.
Los mejores años de su vida los pasó en el barrio Obligado, a orillas del río Reconquista, donde nunca tuvo problemas por ser lesbiana. Pero vio la oportunidad de levantar casa propia en Mariló y fue vivir allá. Algunos varones del barrio la hostigaban continuamente y le prendieron fuego la casa. Vendió el terreno y se fue vivir a barrio Barrufaldi, pegado a Campo de Mayo, junto a su hermana travesti. En Barrufaldi tampoco se dedican a cazar ni a disciplinar tortas. Los problemas en San Miguel empiezan cuando las pibas se van acercando al límite con el partido de Moreno. La pesadilla son las 10 manzanas de Mariló que flanquean al oeste el Golf Club de Bella Vista. Y después del infierno que tuvo que vivir Higui, las cosas se pusieron peor. Hoy siguen amenazando a su familia.
Pero algo que Higui siempre tuvo en claro es que ningún varón le iba a poner una mano encima, a menos que ella quisiera. Su padrastro la abusó sistemáticamente entre los 10 y los 13 años.
(AUDIO) Aire Libre 963: