Por el crimen de Joel Grondona, 12 años de prisión para Miguel Aguerre
El veredicto de los jueces fue de 12 años de prisión bajo el cargo de homicidio simple para Miguel Ángel Aguerre (34), responsable del asesinato de Joel Grondona (27). El hecho ocurrió el 6 de marzo de 2016 en el kiosco “JAD” de la localidad de Tolhuin, cuando lo apuñaló.
Grondona murió en el Hospital Regional de Río Grande luego de ser asistido tras ser encontrado en la puerta del kiosco. Allí fue apuñalado en dos ocasiones por Aguerre, y la autopsia determinó que fue un corte de 10 cms. de profundidad el que le ocasionó daños en órganos vitales y luego de tres paros cardiorespiratorios falleció.
El hermano de la víctima, Ricardo Grondona (40), habló con AIRE LIBRE FM tras conocerse la sentencia y dijo: “Me parece bien la decisión pero como familia esperábamos un poco más”. Y agregó: “Por lo menos sabemos que esta persona no va a estar en la calle y no va a dañar a ninguna familia más como nos hizo a nosotros”.
Durante el debate, se visualizó en las filmaciones de la cámara de seguridad del kiosco “JAD” que Aguerre increpó a Grondona, quien no tuvo reacción y se quedó parado, y además amenazó a un testigo de apellido Nuñez al que invitó a pelear. Sobre esta situación, el hermano de la víctima comentó: “Todos lo vimos. No hay pruebas de que mi hermano lo haya agredido o dicho algo. Más testimonios agregaron de que este señor siempre andaba armado, es una persona mal intencionada que nos arrebató algo muy importante. Voy a seguir luchando por él”.
“Era un chico alegre, le gustaba jugar al fútbol y la música. Tenía a su pareja estudiando enfermería en el norte y un hijito, Aguerre destruyó los sueños de una familia”, de esta manera recordó a su hermano fallecido.
Durante el juicio, el condenado guardó silencio en todas las instancias y no mostró arrepentimiento alguno. Acerca de esta forma de terminar el caso, Grondona expresó: “Jamas sintió arrepentimiento o remordimiento. Es una persona totalmente fría, no siente ni un poquito de culpa por lo que hizo”.
“Mi hijo de dos años aprendió a caminar con Joel. Él tenía una paciencia increíble y ahora mi hogar está vació, lleno de dolor”, finalizó el hermano de la víctima.