Este 8 de octubre se conmemora el Día Internacional de la Dislexia

El 8 de octubre se celebra el Día Internacional de la Dislexia, una fecha que busca sensibilizar a la sociedad sobre esta dificultad de aprendizaje que afecta a millones de personas en todo el mundo. En Argentina, el enfoque en la concientización es esencial, ya que muchas familias y profesionales aún desconocen los signos y las necesidades de los niños disléxicos. A través de una charla con Constanza Gianmarini, exploramos la importancia de visibilizar la dislexia, promover adecuaciones educativas y fomentar un ambiente inclusivo que permita a estos estudiantes alcanzar su máximo potencial.

 

El próximo 8 de octubre se conmemora el Día Internacional de la Dislexia, una jornada que en Argentina se toma como una oportunidad para concientizar sobre esta dificultad de aprendizaje que afecta a aproximadamente el 10% de la población mundial. Este tema, aún poco difundido, requiere una atención especial por parte de las familias y los profesionales que trabajan con niños que presentan esta condición.

 

Constanza Gianmarini, explica que la dislexia se define como un déficit en la adquisición del aprendizaje, que se manifiesta en la dificultad para reconocer la correspondencia entre fonemas y grafemas. “En términos más simples, los niños disléxicos no logran reconocer las letras y sus sonidos de la misma manera que sus compañeros. Esto provoca desafíos significativos en la lectura y la escritura”, comenta.

 

A lo largo de su trayectoria escolar, estos estudiantes pueden mostrar un rendimiento académico por debajo de sus capacidades reales. “Es importante destacar que no presentan problemas cognitivos; comprenden el contenido, pero necesitan adecuaciones específicas en el aula. Con modificaciones simples en la enseñanza y la capacitación de los docentes, estos chicos pueden adquirir las herramientas necesarias para avanzar en su aprendizaje”, agrega Gianmarini.

 

Además, la dislexia a menudo se presenta junto a otras dificultades, como la discalculia, que afecta la comprensión de los números. Sin embargo, con el estímulo adecuado, los niños pueden superar estos obstáculos. “A lo largo de la historia, figuras destacadas como Leonardo da Vinci y Steve Jobs han demostrado que la dislexia no es un impedimento para alcanzar grandes logros”, señala.

 

Para conmemorar este día y aumentar la visibilidad del tema, la torre de agua de Río Grande será iluminada de color turquesa, un símbolo de la lucha por la concientización sobre la dislexia. “Este gesto busca alertar a las familias sobre la importancia de reconocer los signos de la dislexia en sus hijos”, afirma la especialista. Muchos padres pueden malinterpretar el comportamiento de sus hijos, considerándolos vagos o distraídos, cuando en realidad podrían estar enfrentando desafíos de aprendizaje.

 

Gianmarini enfatiza que es fundamental que los padres y docentes estén atentos a señales como la escritura en espejo o la inversión de letras y números. “Si observan estos signos, no duden en consultar con un psicopedagogo para realizar una evaluación”, aconseja.

 

En Argentina, existe una ley nacional que protege los derechos de las personas con dislexia, la cual ha sido adoptada por casi todas las provincias. Sin embargo, aún se trabaja para que La Pampa y Santiago del Estero se adhieran a esta normativa. Esta ley promueve la capacitación docente y la actualización de los pediatras para detectar precozmente los síntomas de la dislexia, asegurando que todos los niños tengan la oportunidad de recibir la ayuda que necesitan.

 

La conmemoración del 8 de octubre es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de la inclusión educativa y el reconocimiento de las diversas formas de aprendizaje, permitiendo que todos los estudiantes, independientemente de sus dificultades, puedan alcanzar su máximo potencial.