Este jueves se cumplen nueve años de la desaparición de Sofía Herrera
Este jueves 28 de septiembre se cumplen nueve años de la desaparición de Sofía Herrera, la niña de tres años que fue vista por última vez en el camping “John Goodall” a 58 kilómetros de Río Grande camino a Tolhuin.
Por ese motivo, los familiares y las autoridades de Tierra de Fuego difundieron una imagen actualizada de cómo sería el rostro de la niña que hoy tendría 12 años para aportar a la búsqueda.
Desde un primer momento las miradas estuvieron puestas en la investigación que demoró el alerta en las fronteras y al otro día había tanta gente que no se pudieron hacer las pericias correspondientes.
El juez Daniel Cesari Hernández, se refirió al avance de la investigación en conferencia de prensa y sostuvo que “el objetivo es difundir la actualización del rostro de Sofía, que está hoy en conocimiento de toda la población”.
El magistrado señaló que “debo expresar mi satisfacción por el compromiso expresado por la sociedad, cuando yo asumí el cargo y di a conocer la actualización, dije que tengo un compromiso profesional pero también humano con la averiguación de la verdad del caso y que este caso trasciende lo jurídico”.
Cesari Hernández relató que a los diez días de haberse difundido nacionalmente el nuevo rostro de Sofía se recibió una denuncia desde Resistencia (Chacho) a través de la red social Facebookque generó una investigación policial y judicial.
“Se daba cuenta de la presunta presencia de una niña de similares características que aparecían en el rostro actualizado de Sofía, que coincidía también con la edad. La niña había sido adoptada al tiempo que Sofía había desaparecido”, contó.
“Me puse en contacto con las autoridades judiciales y a través de la fiscalía se solicitó el allanamiento de aquella vivienda a los fines de localizar a la niña y obtener pruebas de huellas palmares y dactilares. Se realizaron las tareas, se hizo la comparación, y afortunadamente para esa familia y desafortunadamente para nosotros, no hubo coincidencia de identidades”, añadió.
Según el juez “las hipótesis sobre el caso no han variado, son todas, la única certeza que tenemos es que la niña desapareció, esa es una certeza que nos alienta a continuar la búsqueda, si nosotros tuviéramos otro tipo de certeza lamentablemente no tendríamos una esperanza de búsqueda”.
Y remarcó que “mientras nosotros sigamos con esta incertidumbre de en dónde está, podemos seguir investigando, y en ese marco todas las hipótesis son posibles.
Sin embargo relató que “en el transcurso de estos años se han ido descartando hipótesis, pero no podemos hacer lo mismo con todas, en el universo investigativo que nos queda por delante, iremos viendo cuáles de esas hipótesis se puede adecuar mejor a la realidad”.
Asimismo informó que “hasta el primer momento el primer contacto que tuvimos fue la denuncia del Chaco que contactó primero a la madre y ella se puso en contacto con nosotros para dar a conocer esa información y poder investigar”.
El magistrado precisó que “toda investigación es secreta y se debe tener en claro, no es que los jueces no queremos dar información, sino que el propio Código me lo impide, me impone un secreto. La poca información que uno puede dar debe ser muy prudente”.
Aun así adelantó que “estoy analizando determinar algunas tareas y quizás reeditar algunas otras, fundamentalmente puedo decir que estoy evaluando confeccionar una actualización de rostro con otras características en la convicción de que la menor en todos estos años no necesariamente tiene que mantener el mismo tipo de pelo, corte y peinado. Si vamos viendo los diversos rostros son todos muy similares, quizás Sofía hoy está más gordita o tiene el pelo más corto, estamos poniéndonos en contacto con especialistas a los fines de evaluar la posibilidad de hacer una actualización alternativa no tanto para publicidad sino para nosotros incluso con imágenes de la hermana que es bastante parecida”.
Por otro lado aclaró que “no tengo prevista ninguna diligencia en el camping, no me parece productivo hacer ninguna tarea ahí por el momento”.
En cuanto a las posibles fallas en la investigación durante estos nueve años, el nuevo juez de la causa indicó que “si yo me pongo a evaluar lo que actuaron los jueces anteriores sería una imprudencia y una falta de ética, yo lo único que puedo decir es lo que voy a hacer de acá en más. Lo que se ha realizado es muchísimo, y con mucha responsabilidad. No siempre los resultados son el adjetivo pertinente a lo actuado”.
Finalmente expresó que “no descarto ninguna tarea y ninguna hipótesis, y pongo de relieve el profesionalismo con el que se ha trabajado desde aquel entones a la semana anterior a la que yo estuviera”.