Gobierno busca mejorar el perfil y la sostenibilidad de la deuda en dólares
La Provincia busca diferir el pago de las próximas 6 cuotas trimestrales de capital y extender hasta octubre de 2029 el vencimiento de pago final. A cambio ofrece 6 millones de dólares en concepto de “Pago por Consentimiento”.
A fin de alivianar la carga que para las finanzas provinciales representa el actual esquema de pagos de las cuotas trimestrales de capital e intereses correspondientes a la cancelación del Bono TFU27, el Poder Ejecutivo está trabajando en una propuesta de reestructuración para mejorar el perfil y la sostenibilidad del repago de esa deuda.
El pasado mes de septiembre, tanto el Tribunal de Cuentas y la Fiscalía de Estado no formularon, en esta instancia preliminar, objeción técnica alguna sobre la operación de refinanciación puesta a consideración de esos órganos de contralor.
En concreto, la propuesta que la Provincia presentará a los tenedores del Bono TFU27 consiste en obtener una dispensa de los pagos de capital desde el mes de octubre 2023 al mes de abril 2025 y la extensión del vencimiento original del 17 de abril de 2027 al 17 de octubre de 2029. A cambio de ello ofrece a los tenedores un incentivo equivalente a 3 dólares por cada 100 dólares de Títulos de Deuda, lo que totalizará un desembolso adicional de 6 millones de dólares en concepto de “Pago por Consentimiento”.
En abril de 2017 la Provincia salió al mercado internacional de capitales a buscar financiamiento para apalancar un ambicioso plan de obra pública mediante la colocación de un Bono por 200 millones dólares, a una tasa del 8,95%, garantizado con regalías a cancelar en 10 años.
Por esa operación, descontadas comisiones y gastos, ingresaron a las arcas provinciales 189,7 millones de dólares a una tasa del 8,95%, que debían ser devueltos en cuotas trimestrales, de capital más interés, con vencimiento la última de ellas en abril de 2027.
La crisis económica que viene sufriendo el país (creciente déficit fiscal, alta inflación, falta de reservas en dólares) ha tenido un obvio impacto negativo para las finanzas provinciales “caracterizada principalmente por una caída en términos reales de los ingresos de origen nacional y los provenientes de regalías con respecto al año pasado; las pautas salariales negociadas y homologadas en la Administración Central como en los Entes Descentralizados y la acumulación de una deuda flotante en torno a los 23 mil millones de pesos”.
Para tratar de mejorar ese complejo panorama se apunta “a reestructurar el Bono TFU27, generando un plazo de gracia para el pago de capital que generaría un mayor recurso de libre disponibilidad para la Provincia, consecuencia del monto de regalías que dejaría de garantizar el pago, lo que contribuiría a paliar los efectos de la situación financiera expuesta”.
(Fuente: el diario del fin del mundo)