Guillermina Nuñez, una nueva Licenciada en Sociología que inspira con su historia de superación

En una era donde muchos creen haber alcanzado su límite, Guillermina Nuñez demuestra que siempre hay algo más por dar. A los 56 años, se recibió de Licenciada en Sociología en la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, una meta que alcanzó gracias a su perseverancia y amor por el conocimiento. “A esta altura de la vida, uno piensa que ya lo dio todo y en realidad no es así, todavía quedan cosas para dar, quedan pilas y si uno tiene la bendición de tener buena salud, teniendo la universidad a un paso, porque por más que tengas que tomar un colectivo o vayas caminando o uses tu propio medio de transporte, tenemos una universidad nacional pública y es la oportunidad porque las puertas están abiertas para todos”, señaló en diálogo con AIRE LIBRE FM.

Guillermina llegó a Tierra del Fuego en 2001, y desde entonces ha trabajado incansablemente en la enseñanza y la traducción. Sin embargo, su deseo de seguir aprendiendo la llevó a inscribirse en la Universidad Nacional de Tierra del Fuego en 2013. “Yo soy profesora de inglés, vine de Bahía Blanca en el año 2001, trabajé siempre de profesora de inglés y también de traductora, estudié traducción en la Universidad del Comaú, pero llegó un momento que quise seguir estudiando, era difícil acá y en el 2013 abrió una universidad, yo esperé a ver qué carrera tenía, cuando vi que estaba Sociología, averigué, pregunté por los programas, los requisitos, me gustó y empecé a mi ritmo.”

 

 

 

 

Empezar una nueva carrera no fue sencillo, pero su entusiasmo y dedicación le permitieron avanzar y finalmente alcanzar su meta. “Empecé en el 2014-2015, haciendo una o dos materias por cuatrimestres y me entusiasme y de repente ya tenía todo cursado, hice el trabajo final y bueno, fue un recorrido largo, pero muy lindo, largo porque bueno, uno ya tiene familia, su casa, hay que atender su trabajo, entonces tenés que encontrar los momentos, pero se puede y bueno, para mí es un logro enorme.”

 

 

 

 

La elección de la carrera de Sociología fue motivada por una curiosidad intelectual y una pasión por entender mejor la realidad social. “Como yo te dije, yo soy profesora de inglés y estudié también traductora en la Universidad del Comaú, en el profesorado de inglés ves mucha literatura, mucha historia, porque para ser profesor de inglés tenés una formación sobre la cultura de la lengua extranjera que vas a enseñar, pero el tema fue que en el traductorado se me despertó una curiosidad.”

 

 

 

 

La influencia de la literatura y la cultura en su vida la llevó a descubrir una necesidad de profundizar en el análisis social. “Empecé a encontrar que había cuestiones dentro de la literatura que tenían que ver con lo social, y yo no tenía herramientas para poder analizarlo, diciendo que siempre me gustó leer, tiene que haber algo, y sí, era sociología, ciencia política, antropología, que son todas ciencias sociales.”

 

 

 

 

A lo largo de su carrera, Guillermina encontró inspiración en las palabras del sociólogo Pierre Bourdieu. “La sociología es un deporte de combate… nosotros pensamos, los que estudiamos sociología, pensamos que la sociología es una ciencia que incomoda, porque no importa qué sociedad estudia, qué sociedad analice, qué sociedad intenta explicar, siempre se basa en la desigualdad y en el por qué de esa desigualdad.”

 

 

 

 

Finalmente, después de años de esfuerzo y dedicación, Guillermina logró graduarse como socióloga, un hito que representa su tenacidad y pasión por el conocimiento. “La sociología está ahí para ayudar a hacer un reconocimiento que viene desde lo académico. No es una opinión, no se trata de algo que se saca del aire, sino que hay algo científico que te está diciendo, bueno, podés salir, podés luchar, podés reclamar y vas a conseguir cosas.”

 

 

 

 

La diversidad y complejidad de la sociedad fueguina también es un tema que Guillermina ha observado de cerca. “Lo que yo veo de esta sociedad que me abrazó y que me sigue abrazando es que es una sociedad compleja, más que nada porque somos más los que venimos de otras comunidades que los que nacieron acá… entonces es una sociedad donde hay personas de muchas comunidades, de muchas ciudades del país y también de otros países.”

 

 

 

 

Su mensaje es claro y alentador para aquellos que dudan de sus capacidades para estudiar una carrera universitaria. “Que se animen, que la Universidad Nacional de Tierra del Fuego tiene profesionales de primera línea… cualquiera puede entrar a esa universidad y puede salir con un título… yo pude y me recibí a los 56, yo creo que puede cualquier persona.”

 

 

 

 

Esta es la historia de Guillermina Núñez, una mujer que ha demostrado que con esfuerzo, dedicación y la convicción de que nunca es tarde para aprender y crecer, se pueden alcanzar grandes logros. Hoy, Guillermina es licenciada en Sociología, un título que alcanzó gracias a su perseverancia y amor por el conocimiento.