Gunter Plüshow, el primer hombre en volar sobre Tierra del Fuego, ya tiene su monumento
La obra está ubicada en la plazoleta Plüshow (Onas y Maipú), espacio que había sido inaugurado el año pasado en ocasión del 90 aniversario de la hazaña del Cóndor de Plata, y que contó con la presencia de la Cónsul General de Alemania en Argentina, Susanne Kempermann.
Con la participación de la Secretaria de Cultura y Educación de la Municipalidad, Angelina Carrasco, la Subsecretaria de Relaciones Internacionales, Asuntos Antárticos y Malvinas, Cecilia Fiocchi, el Cónsul honorario de Alemania en Ushuaia, Ing. Rafael Fank, los concejales Juan Carlos Pino y Gabriel De la Vega, representantes de la comunidad alemana en Tierra del Fuego y la Asociación de Colectividades de Ushuaia, se inauguró la escultura en homenaje a Gunther Plüschow.
La obra está ubicada en la plazoleta Plüshow (Onas y Maipú), espacio que había sido inaugurado el año pasado en ocasión del 90 aniversario de la hazaña del Cóndor de Plata, y que contó con la presencia de la Cónsul General de Alemania en Argentina, Susanne Kempermann.
El 3 de diciembre de 1928, Gunther Plüschow se convierte en el primer hombre en volar en Tierra del Fuego en el ahora rebautizado hidroavión Heinkel “Cóndor de Plata”, que acuatiza en la bahía de Ushuaia (Argentina) la ciudad más austral del mundo, donde traslada el primer correo aéreo formado por piezas postales provenientes de Punta Arenas (Chile). Fue un vuelo de dos horas.
El objetivo de este pionero de la aviación era explorar Tierra del Fuego, navegar sus mares y fiordos, volar sobre ella, filmarla, fotografiarla y compartir su belleza con todo el mundo.
Tras dos años más de recorridas por la Patagonia, regresó a Alemania donde publicó el libro “Cóndor de Plata sobre Tierra del Fuego” y exhibió una película documental, siendo uno de los primeros registros audiovisuales sobre el extremo austral de nuestro país.
Gunther Plüschow nació en 1886 en Munich, Alemania, y participó de la primera guerra mundial. Falleció en un accidente aéreo cerca de El Calafate en 1931.
La escultura inaugurada en la ciudad de Ushuaia fue impulsada por la Fundación Alemana de Tierra del Fuego, y fue tallada en la ciudad por el artista plástico Juan Bejarano, realizada en un bloque de mármol travertino, que se distingue por su inalterabilidad en el tiempo.
En Tierra del Fuego residen 20 alemanes y más de 100 descendientes, según información suministrada por el consulado alemán. Alemania es un emisor importante de turistas hacia la provincia.
La ciudad de Ushuaia homenajea a este célebre aviador dándole su nombre a una de sus calles ubicada sobre uno de los laterales de la plaza Piedrabuena, entre la nueva sede del Poder Judicial de la provincia y la Casa Beban.