La abogada de la madre de Maia enumeró una serie de irregularidades de la Justicia

El caso que conmueve a la comunidad de Tolhuin continúa tomando relevancia pública tras la protesta realizada este lunes por la tarde frente al Juzgado. La abogada Marisel Banegas dijo en AIRE LIBRE FM que “este no es el primer caso, se han vulnerado todos los derechos de Maia y de su madre”. Además, lanzó fuertes críticas contra el juez Silvio Pellegrino y el accionar de la Comisaría de Género.

“Tenemos que decir que Maia no es la primera niña ni la única que atraviesa un caso como este. Maia es una niña fueguina con un padre ausente hasta los cinco años, ella tiene diez. Los últimos cinco años está judicializada en Tierra del Fuego. Hoy no podemos decir que haya un juez competente en Córdoba y que se ocupe de decidir sobre sus derechos”, comentó Banegas.

La abogada contextualizó el origen de la relación entre Maia y su padre, quien estuvo “desaparecido de su vida” hasta los cinco años: “Maia estuvo toda su vida en TDF junto a su mamá, como madre soltera con ella y sus dos hermanitas, cuando ella decide solicitar una cuota alimentaria al padre, de lo que ella está arrepentida hasta el día de hoy, ahí fue cuando el padre empezó la lucha de querer llevársela, le nació el amor. No tengo nada en contra del papá,ni de ningún hombre, pero esta situación como la de Maia ya ha sucedido. Maia lamentablemente se fue en diciembre de 2019 de vacaciones y debía regresar en febrero del 2020, pero no lo hace por decisión del padre, que hoy dice fue por la pandemia, pero hasta el 20 de marzo estuvieron en un tire y afloje. Luego no la pudo enviar por la pandemia”.

“Ese año se pidió la cautelar, no hubo una restitución como la que hoy se animó a hacer el juez de Córdoba y recién ahora, un año y medio después, puede ser escuchada. En su momento, Maia estaba disfrutando allá, del sol, pileta y sus amigos, le dijo a la asistente social que ella estaba bien en esa ciudad, pero en ningún momento dijo que no quería a su mamá. Bajo ese punto de vista, la mamá acordó con el papá para que vean con quién se iba a quedar, y un régimen de comunicación para Lourdes. Eso se lo hizo por escrito porque el papá estaba en Córdoba”, señaló.

Y agregó que “ella siempre vivió con la madre antes. Ahora el padre utiliza esta acta diciendo que hubo un incumplimiento cuando él fue quien incumplió al no mandarla en julio del año pasado y casi no mandarla en diciembre”.

“El juez sólo conoce el acta acuerdo, y tiene carácter de sentencia, pero no es definitivo. Se debe escuchar a la madre y a la niña. Acá intervinieron psicólogos, asistente social, abogado del niño, donde se hizo un informe para echar para atrás esa acta acuerdo que se hizo, pero en atención a las palabras de Maia que deseaba quedarse en esta ciudad. Cuando llega el exhorto a Tolhuin, no lo mandaron a Ushuaia porque allá conocen a Maia, el juez Pellegrino no conocía nada y sólo tenía ese exhorto. Luego tenían la posibilidad de escucharme a mí, a la madre o a las autoridades que hicieron el informe. Nos encerraron en el juzgado con custodia, no nos respetaron ni a la niña, ni a su mamá y su familia, no la dejaron despedirse”, reclamó.

Luego, Banegas criticó el accionar del personal de la Comisaría de Género: “Estaban todos en shock, no sabían qué hacer. Si respetar los derechos de la niña, de la madre como mujer, si recibir las órdenes del juez, no sabían qué hacer. Pero sí sabían que la psicóloga debía convencer a Maia para irse con su papá, eso sí lo tenían claro. Cuando llegan las autoridades de Derecho del Niño, pidiendo asistir a Maia, el juez les dijo que se retiren a la directora provincial de Derecho del Niño, le preguntó si era abogada, y que los iba a sacar con la Policía en ese momento. Una serie sistemática de violencia de los derechos del niño, de las mujeres, nada de eso tenía valor jurídico más que la firma de un juez de Córdoba”.

Para cerrar, la letrada comentó que “aún no se denunció al juez, ni a personas determinadas, queremos ver que se resuelve de la asesora pupilar, que requiere revocar la decisión y que venga la niña a esta ciudad para que se la escuche respetando sus derechos”.