Operarios de Textil Río Grande cobraron $4000 y peligra la continuidad de la empresa

Si bien la empresa viene con problemas desde hace tres años, con la pandemia se agudizaron. Los casi 85 operarios, que veían cobrando el sueldo desdoblado, el martes pasado les depositaron $4000. Joaquín Torres, delegado de textil Río Grande, afirmó en AIRE LIBRE FM que la empresa “no se hace cargo de las cuotas alimentarias y tenemos problemas con la obra social hace tiempo”.

“Veníamos mal, con problemas de materia prima, y cuando se liberó arrancó la pandemia. Lo único que pudimos cobrar fueron $4000. A raíz de eso solicitamos o queremos que alguien se haga oídos de la situación”, dijo Torres.

Ahora, tanto la empresa como el gremio AOT están solicitando el prestamos que nación iba a dar para pagar los sueldos.

“La empresa cobra por el banco HSBC hace 15 años. Habían conseguido material para trabajar y empezó la cuarentena. Ayer, el secretario general dijo que no se sigue trabajando y seguía la cuarentena. Si no conseguían el prestamos peligra la continuidad de la empresa”, agregó.

“La situación es critica y con la pandemia no se puede hacer nada”, aseguró Torres. Y afirmó que, desde que empezó la cuarentena, los contactos con los representantes de la empresa se redujeron.”Se provechan porque tienen nuestros teléfonos”, dijo.

Walter Hernández, otro de los delegados, señaló que pudieron tener comunicación con el ministerio de trabajo, “pero si la empresa no consigue el préstamo no se van a pagar los haberes”.

“La empresa no asegura la continuidad después de la cuarentena. Están haciendo lo posible para solicitar el prestamos, agotando las instancias. En Buenos Aires están tratando a través del banco Nación para la semana que viene, pero es una incertidumbre total”, manifestó Hernández.

“Son 85 familias que tiene que mantener alquileres y no hay respuesta de ningún lado. Es desgastante y preocupante, suena a tomada de pelo, porque el martes nos encontramos con un depósito de $4000”.

“Estamos con la fábrica con las puertas cerradas y algunos compañeros quieren ir a plantarse en la fábrica con sillas y no queremos cometer una locura, son familias que hoy no tienen para comer”, agregó el delegado.

Y pidió que “esto llegue a los funcionarios. Cualquier ayuda que podamos tener bienvenida sea”.