Reclamo judicial para que el PAMI de Río Grande desaloje el edificio
El abogado Matías Ibarra explicó que el PAMI se niega a entregar el edificio que ocupa en calle Espora, casi Perito Moreno de Río Grande, pese a que el contrato finalizó el 30 de noviembre del año pasado. Este reclamo comenzó en el pasado mes de noviembre.
La dueña no lo quiere seguir alquilando pero el ente nacional se niega a hacerlo, aunque está abonando el alquiler.
El Dr. Matías Ibarra explicó que el PAMI se niega a entregar el edificio que ocupa en calle Perito Moreno de esta ciudad, pese a que el contrato finalizó el 30 de noviembre del año pasado.
Resumió que se trata de una demanda de desalojo por vencimiento del plazo del contrato de alquiler. Se le ha notificado al PAMI que no se renovaría dicho contrato que mantenía sobre la propiedad y que debía desalojar el inmueble, “negándose injustificadamente a hacerlo desde noviembre del año pasado”.
Por tal motivo “nos vimos obligados a iniciar la acción de desalojo que se tramita por ante la Secretaría Civil del juzgado Federal de Ushuaia”, le informó al diario Provincia 23.
El letrado abundó en que “se había firmado un contrato de locación por tres años, que se venía cumpliendo desde el año 2019 y tenía vigencia durante tres años y finalizó el 30 de noviembre de 2022”.
Agregó que “las partes no se pusieron de acuerdo en la renovación del contrato; es decir, mi cliente -Cecilia Mallemaci- no quiso renovar el contrato puesto que no estaba conforme con el monto del alquiler que se le hacía en concepto de locación mensual y en virtud de esta situación, no se renueva el contrato y al no hacerlo, dicho contrato fenece, expira y esa es una de las causales por la cual finalizó, no existe más”, enfatizó.
Explicó que “al no existir renovación, no existir una tácita reconducción, es que se mandan las respectivas cartas documento solicitando que se proceda al desalojo y a la restitución del inmueble a la propietaria, a lo cual el PAMI hace oídos sordos, no quiere desalojar no inicia la desocupación y no solo que lo sigue ocupando, sino que sigue realizando obras y atención al público en forma normal, esperando precisamente que se inicie un juicio por desalojo”.
El abogado aseguró que “luego de varias conversaciones que hemos tenido, no hubo posibilidad de llegar a ningún entendimiento y lamentablemente tuvimos que iniciar el juicio”.