Rossi sobre obras provinciales en Río Grande: “No cambian la matriz económica”
El concejal por la UCR, Paulino Rossi reflexionó sobre la situación de la provincia, en general y reclamó “empezar a construir un modelo de provincia a mediano y largo plazo”, para lo cual remarcó la necesidad de “aprender de los errores del pasado” pero además “tener la capacidad de verlos cuando ocurren en el presente”.
En el mismo sentido recordó que en el caso de la zona norte de la provincia destacó que su “mayor fortaleza es la explotación de recursos hidrocarburíferos” advirtió que se trata de “recursos que no son renovables” razón por la cual, opinó que “se debe optimizar su utilización”. Además recordó que “la Carta Orgánica establece que se debe prestar especial atención a este tipo de ingresos y velar por su buen uso”.
En tal sentido señaló que “muchos países que cuentan con este tipo de recursos prevén el futuro reinvirtiendo en otro tipo de actividades que garantizan un cambio en la matriz económica, como una estrategia ante el agotamiento de los mismos” señaló el edil.
Además Rossi recordó que esta situación no la sufre la zona sur de la provincia dado que Ushuaia tiene su fortaleza económica “en la actividad turística”.
En la misma línea Rossi se preguntó “¿Qué pasó en Tierra del Fuego?” dado que a su entender “hace más de veinte años la provincia se endeudó por primera vez, a través de un compromiso de pagos con regalías hidrocarburíficas, los denominados Bonos Albatros. Parte de estos bonos se destinaron a hacer infraestructura en zona sur: se hizo el Cerro Castor, se amplió el Aeropuerto Internacional y el Puerto de Ushuaia. Estas obras están hechas y nadie puede negar que beneficiaron en el aumento de la capacidad productiva de la capital provincial” remarcó a modo de reproche.
Ya que a renglón seguido subrayó que la ciudad de “Río Grande no tuvo la misma suerte, la obra del puerto – que hace más de veinte años está paralizada – hoy es una lobería, no solo no se hizo, sino que se malgastó un montón de dinero que, luego, tuvimos que pagar a través de las rentas producidas por las regalías hidrocarburíficas”.
Por lo tanto reflexionó sobre el tema y lamentó que “a pesar de que pasó tanto tiempo, hemos vivido un segundo proceso de endeudamiento con el mismo mecanismo” ya que “se comprometió el pago futuro por diez años de estas regalías con un interés muy alto de 9 % en dólares para realizar obras públicas”.
Rossi remarcó que a partir del endeudamiento “en la zona sur se va a ampliar el puerto, se va a trabajar en un circuito turístico de apertura de nuevas rutas y se va a ampliar el tendido de fibra óptica para mejorar la conectividad, por lo cual se amplía nuevamente la matriz productiva en esta región” pero advirtió que como contrapartida “en la zona norte, por otro lado, la obra que se destinó fue un microestadio. Nadie duda de la necesidad del espacio deportivo para convocar gente, pero esto no cambia la realidad ni la matriz económica de Río Grande. Por lo tanto repetimos dos veces el mismo error” remarcó contrariado el concejal.
Además opinó que es necesario hacer “otro análisis sobre la distribución de las regalías hidrocarburíficas. Se están destinando en su gran mayoría a gastos corrientes y, como es común, el 70 % de estos gastos son para la zona sur” dado que “en la capital fueguina están los sueldos más altos y toda la estructura administrativa del Gobierno Provincial”.
Por lo cual consideró que “esta situación perjudica a la zona norte de la provincia, donde se generan los recursos, ya que no hay nada que se esté haciendo para que haya una real transformación en Río Grande, el día que estos recursos se agoten”.
Además “si a todo esto le sumamos, a su vez, el Fideicomiso Austral -que también son recursos hidrocarburificos off shore-, desde el municipio se solicita que se financien obras de infraestructura pero, por cuestiones políticas, se dirigen esos recursos a la zona sur dejando relegada a la ciudad de Río Grande” explicó Rossi.
Por lo tanto consideró necesario que desde “las instituciones tenemos que empezar a trabajar en la defensa de los intereses de Río Grande para que se ponga en discusión un programa económico a mediano y largo plazo con herramientas que realmente consideren el cambio de la matriz productiva de la provincia, que no sea simplemente excusa de los puestos laborales por la caída del nivel de la actividad metalúrgica”.
Y opinó que esto será posible “identificando obras de infraestructura o zonas aledañas para poder aumentar la capacidad económica de la ciudad”.