Se hará el juicio por el asesinato de la joven estudiante Marianela Rago

Francisco Amador, acusado del asesinato de Marianela Rago Zapata, la estudiante riograndense de periodismo que en 2010 fue hallada degollada y con 23 puñaladas en el barrio porteño de Balvanera, irá a juicio; pese a que a lo largo de la investigación fue sobreseído cinco veces.

A 10 años del crimen de Marianela Rago Zapata, la estudiante de periodismo que en 2010 fue hallada degollada y con 23 puñaladas en el barrio porteño de Balvanera, su exnovio, Francisco Amador, irá a juicio oral pese a que a lo largo de la investigación fue sobreseído cinco veces en una causa que, además, cuenta con cinco evidencias en la escena a las que la Justicia nunca les pudo poner nombre y apellido, adelantó el portal de Télam el pasado sábado.

La nota continúa señalando que “Fuentes judiciales informaron a Télam que el debate que tendrá como acusado a Amador (33) se realizará ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 29, integrado por los jueces Rodolfo Goerner, Juan María Ramos Padilla y María Cecilia Maiza”.

“Este año el TOC 29 debía proveer la prueba propuesta por las partes y fijar una fecha de debate, pero todo quedó demorado a raíz de la parálisis judicial por la pandemia del coronavirus” prosigue el informe.

“Amador llegará al juicio acusado de homicidio simple -con pena de 8 a 25 años de prisión-, ya que la figura del femicidio recién se incorporó al Código Penal a partir de 2013 –indica la nota periodística- La acusación estará a cargo del fiscal general Sandro Abraldes -uno de los que en 2015 logró la prisión perpetua del portero Jorge Mangeri por el femicidio de Ángeles Rawson-, quien ya actuó en la causa en las apelaciones ante la Cámara de Crimen”.

“En base a prueba indiciaria y antecedentes de violencia y maltrato que hubo en la pareja, Abraldes intentará llegar a una condena y defender en el juicio la convicción que siempre tuvo la fiscal de instrucción de la causa, Marcela Sánchez, respecto a que Amador fue el asesino” destaca.
Cabe indicar que la madre de Marianela, Patricia Zapata, estará representada como querellante por la abogada Verónica Cicchi, mientras que el acusado Amador, será defendido por el abogado Luis Ricca.

EL ASESINATO

Marianela Rago Zapata (19) era de la localidad fueguina de Río Grande, pero estaba en Buenos Aires estudiando periodismo en el ETER cuando el 27 de junio de 2010 no asistió a una juntada con sus amigos para ver el partido que la selección Argentina le ganó 3 a 1 a México por los octavos de final en el Mundial de Sudáfrica 2010, informa el portal de noticias Télam.

Todos se preocuparon porque Marianela no contestaba mensajes ni atendía llamados y así fue como el 28 de junio por la noche, su hermano la halló asesinada en el living del departamento 7° “A” que alquilaba en la calle Tucumán 2080.

Según la autopsia, Marianela murió degollada y quien la asesinó le aplicó 23 puñaladas con una cuchilla que desapareció del cajón de la cocina de la casa.
El asesino también se llevó un juego de llaves, dos teléfonos celulares, una notebook, un reproductor de MP3, otro de DVD y una cámara de fotos.

La madrugada del domingo 27, Marianela había organizado en su casa una “previa” a la que sus amigos del sur fueron a jugar a las cartas antes de ir al boliche “El Bárvaro”, de Cabrera y Anchorena, Palermo, donde la vieron por última vez a las 8.

Su exnovio, Amador, un técnico informático también oriundo de Tierra del Fuego, se transformó de inmediato en sospechoso cuando el círculo de amistados y allegados de la víctima contó una serie de episodios de maltrato del pasado.

Incluso, en el mismo momento en el que Matías Rago hallaba a su hermana asesinada en el departamento de Balvanera, Amador tocaba el portero eléctrico en la puerta del edificio al que también había ido, según dijo, preocupado por su ex.

Amador fue detenido, le allanaron la casa, le secuestraron ropas y se declaró inocente.
En su indagatoria, reconoció que el 24 de junio pasó la noche junto a Marianela en el departamento de la calle Tucumán, ya que a veces se seguían frecuentando, pero que la madrugada del 27 junio de ese año había salido con una chica a la que pasó a buscar por Palermo y llevó hasta su casa en Caballito, coartada ratificada por testigos y que le permitió ser liberado en pocos días.